“En nombre de una racionalidad organizativa el cuerpo sufre
en la sociedad moderna la inscripción disciplinaria”.
“El cuerpo está también directamente inmerso en un campo
político; las relaciones de poder operan sobre él una presa inmediata; lo
cercan, lo marcan, lo doman, lo someten a suplicio, lo fuerzan a unos trabajos,
lo obligan a unas ceremonias, exigen de él unos signos"
Vigilar y castigar
Michel Foucault
RAYADOS ESTAMOS TODOS: PENSAR LA SALUD MENTAL EN CLAVE DE DERECHOS
HUMANOS
Azul Cordo
09.10.2013
Si hay algo que se aprende
compartiendo una mañana en Radio Vilardevoz es que todos estamos locos. Por
suerte. Porque sin esas lentes el mundo se vería mucho más aburrido, mucho más
sinsentido. Aceptar nuestra locura y volverla una herramienta transformadora
nos permite lograr un grado de sensibilidad necesario en esta coyuntura tan
egoísta que nos tocó.
Sin embargo, la lógica manicomial
nos rodea, nos circunda, nos envuelve. Y medicamos, muchas veces en forma
abusiva, a quien diagnosticamos bajo alguna patología. Luego, esa patología nos
define, se vuelve nuestra carta de presentación: "Hola, soy José y soy
bipolar", "Hola, soy Melissa y soy border, un rato estoy eufórica y
luego me deprimo".
Jamás en el patio de la
Policlínica del Hospital Vilardebó, donde circula la buena núsica que sale de
los parlantes de la radio, conocí a alguien con una patología. Ni nadie me
preguntó la mía.
El universo de colores, alegría,
historias compartidas, rincones para charlar, para jugar, para pintar, para
escucharnos, que construye desde hace más de 15 años Radio Vilardevoz, ha
expandido sus fronteras y excede ampliamente a Millán 2515.
Los locos y las locas estamos en
todos lados. Solo que algunos tenemos diagnóstico y otros no.
La Salud Mental es un derecho
humano. Y desde esa perspectiva trabaja este colectivo de radialistas. Una
perspectiva, por lo tanto, que apunta a que nos empoderemos, a que no nos vean
como desiguales y, a la vez, a que valoremos nuestras diversidades.
El enfoque de derechos debe ser
pensado desde el derecho a la salud y, por ende, a la salud mental.
Eso debería suponer prácticamente
un nulo encierro: la desmanicomialización -tan difícil de pronunciar, pero más
aún difícil de lograr por parte de las instituciones sanitarias-.
Y no es solo el encierro. La desmanicomialización es también generar
condiciones habilitantes para que las personas que pasaron por algún tipo de
tratamiento e internación, cuenten con acceso a un trabajo digno, revinculación
social y acceso al derecho a la cultura y a la educación. La
manicomialización es la medicalización de las patologías, en lugar de tejer
redes sociales de contención y afecto, que es lo que más cura.
La Asamblea Instituyente por
Salud Mental, Desmanicomialización y Vida Digna, que convocó a la Marcha por la
Salud Mental este jueves 10 de octubre, propone la desmanicomialización,
entendiéndola como una forma de "desestigmatizar la locura".
"Entendemos la lógica manicomial como una lógica de normalización
y homogeneización, lógica victimizante, estigmatizante, de producción de
aislamiento y soledad. Consideramos que la lógica manicomial no sólo está
ubicada en el espacio hospitalario, entre muros o rejas, sino también en las
formas de relacionamiento y la construcción de identidades vulneradas",
afirman.
"Ante esta realidad, se hace
necesario promover prácticas sustitutivas humanizantes, participativas,
creativas y transdisciplinarias, a través de la profundización del modelo de
atención comunitario, que tenga en cuenta los siguientes puntos: vivienda digna
para las personas que egresan de internaciones, apoyar un sistema de cuidados
adecuados, generación desde el Estado y con regulación de éste de más centros
de rehabilitación y dispositivos de sostén social, des-hospitalización adecuada
y progresiva, condiciones para la inclusión laboral".
Y también reclaman tener una vida
digna, promoviendo "el ejercicio de la vida desde la autonomía, la
libertad, la singularidad y la acción transformadora, que garantice el acceso
pleno a condiciones de vida digna", contra la "mercantilización de la
salud"; por una Ley de Salud Mental; por la despatologización de los modos
de existencia no-hegemónicos; por la participación y restitución de derechos de
los usuarios y usuarias de la salud.
El Colectivo Vilardevoz propone y
habilita espacios creativos. Además de la radio, generan talleres de escritura
y de otras artes.
Las poesías allí son el pan de
cada día. Varios y varias artistas se escuchan a través de sus micrófonos.
Para entender esto de los efectos
de la manicomialización, o cómo se ve un hospital psiquiátrico, comparto el
poema "El hospital" de Carolina Miguel:
El hospital
Entre estas paredes se juntan
verdades trastornadas,
mentes agotadas,
patologías confirmadas,
credos desterrados,
ambiciones denegadas,
luces y sombras,
gritos que aturden,
y nos vemos errantes en este lugar
viendo llegar las palomas
como queriendo pedir
nuestra libertad.
Carolina Miguel set, 2013.
Radio Vilardevoz
De: uy.press- Agencia Uruguaya de Noticias
La locura no se puede
encontrar en estado salvaje. La locura no existe sino en una sociedad, ella no
existe por fuera de las formas de la sensibilidad que la aíslan y de las formas
de repulsión que la excluyen o la capturan.
Michel Foucault